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Había tres tipos de besos en la antigua Roma - Escritor Antonio de Calera
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Había tres tipos de besos en la antigua Roma

Había tres tipos de besos en la antigua Roma

Había tres tipos de besos en la antigua Roma como se puede ver en el Ars Amandi de Ovidio: osculum, entre conocidos, es el beso amistoso, de paz y religioso y se daba en la mejilla, basium el beso de afecto que se intercambiaban entre allegados cercanos y familiares al saludarse, es el beso de afecto, en los labios, y suavium el beso erótico y profundo, es el beso de amor por antonomasia entre amantes enamorados, en la boca. Hay muchos tipos de besos: largos, fugaces, ensalivados, apasionados, juguetones, con chipí –lengua-, exploradores, de tornillo, románticos, robados, suaves, dulces, de mariposa, de fiera, tímidos, de Judas, el primer beso, el último beso, el beso al muerto para inhalar su alma. Beso procede del latín basiare y este del sánscrito bhadd “abrir la boca” y está ligado a las primeras y prehomínidas manifestaciones de amor materno-filiales, también dicen que el beso procede de la antigua Grecia en los años 500 a.C. cuando las mujeres probaban la boca de sus maridos para saber si habían bebido vino.  Yo creo que el beso es mucho más antiguo, ojalá se encuentre algún día el beso fósil, hay que ir a la búsqueda del beso fósil. ¿Qué pasa con los besos no dados, con aquellos que decimos: Me quedé con las ganas de darle un beso. Adónde van a parar esos besos?

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